Propósito y Valores de una Universidad Corporativa

En un artículo previo, presenté los cinco elementos clave en el diseño de una Universidad Corporativa:

• Elaboración de un diagnóstico estratégico
• Determinación de la estrategia y diseño de la cultura de aprendizaje
• Diseño de un gobierno eficaz y procesos eficientes
• Determinación de indicadores
• Elaboración de un modelo para el desarrollo de competencias

Posteriormente, en otro artículo profundicé en el diagnóstico. Ahora reflexionaré en algo que por tener carácter permanente va antes de la estrategia y por tanto inspira su selección.

El Propósito y los Valores de la Universidad Corporativa son su esencia. Son importantes porque la razón de ser de la Universidad es contribuir a alcanzar la visión y misión de la empresa, mientras que la de un Departamento de Capacitación, por ser más táctica u operativa, se enfoca en lograr que las personas hagan un mejor trabajo. La estrategia puede cambiar de un año a otro -aunque no sea lo recomendable-, pero el Propósito y los Valores no cambian.

El Propósito no es el “qué” ni el ”cómo”, sino el “porqué”. Es la razón central que justifica la existencia de la Universidad Corporativa. Es identidad que trasciende los cambios tecnológicos, de productos o mercados de la empresa.

Si en una organización se afirma que el propósito de su Universidad es “ofrecer capacitación de primer nivel” estaría confundiendo el “qué” con el “porqué”. Mientras que una respuesta que se encamina más al “cómo” y no al “porqué” es: “hacer un eficaz diagnóstico de necesidades de capacitación, tener bien hechos y actualizados los perfiles y descripciones de puesto, elaborar planes de desarrollo individual, hacer evaluaciones que permitan medir la eficacia de la capacitación y tener indicadores y medir el ROI de la capacitación”. Como puede observarse, esta respuesta es una enumeración de “cómos”.

Lo que falta en ese par de ejemplos es la esencia. Simon Sinek, en su libro Start with Why, dice que todo el mundo sabe lo que hace, algunos saben cómo hacerlo y solo muy pocos saben por qué lo hacen. En ese sentido no bastan el qué y el cómo.

Cada empresa debe encontrar la esencia de su Universidad Corporativa; cuál es esa identidad que trascenderá más allá de los cambios en su estrategia. Algunos ejemplos de lo que puede ser el propósito de una Universidad Corporativa son:

• Potenciar el aprendizaje y el conocimiento individual y organizacional, a fin de contribuir a que la empresa logre su misión.
• Detonar el gran potencial que tiene cada colaborador de la organización.
• Lograr que las personas que integran la organización se emocionen con su desarrollo profesional, contribuyendo así al crecimiento de la organización.

Por su parte, los Valores son criterios que sirven como brújula para orientar la manera de actuar de las personas en la Universidad Corporativa. Es una guía de referencia para evitar que el equipo se desvíe de su Propósito.

Cada empresa y Universidad Corporativa debe encontrar sus propios Valores. Sin carácter limitativo presento algunos ejemplos:

• La empresa buscará el crecimiento de la persona.
• Los colaboradores deben encontrar en la organización oportunidades para crecer en el ámbito personal y profesional.
• El crecimiento debe encaminarse a que la persona alcance su máximo potencial.
• El aprendizaje continuo es un elemento clave del bienestar holístico de la persona.
• Los objetivos de la organización nunca estarán por encima del valor de las personas.
• Las personas se motivan cuando sienten que su sentido de vida se conecta con el propósito de la organización.
• El crecimiento de la persona, para que sea efectivo, debe ser integral.

La tarea más importante en el proceso de definir el Propósito y los Valores es saber hacer las preguntas indicadas para descubrir qué ha sido, es, y será lo esencial de la empresa y cómo es que se da el crecimiento y aprendizaje de su gente. Encontrar lo que hay que preservar más allá de los cambios temporales.

Respecto a quiénes deben participar en el proceso de definición en cada empresa será diferente, pero en principio la responsabilidad podría ser de la dirección de recursos humanos junto con el equipo gerencial de la Universidad Corporativa. Se requerirá además la aceptación del equipo directivo de la empresa y en particular de la dirección general. Como parte del proceso deberá promoverse la reflexión y el debate de las ideas así como evitar dar crédito a ideas sin sustento. El apoyo de un consultor externo puede ser clave para dirigir el proceso y encauzar de la manera correcta las aportaciones de las diferentes personas. El ejercicio debe ser formal y colaborativo, y el resultado debe  comunicarse y promoverse en la empresa como parte del plan de la misma Universidad.

El Propósito y los Valores deben ser auténticos, atractivos y concisos. También deben ser claros respecto al impacto que se espera tener y quién se beneficiará con el resultado. Un Propósito como “mejorar la vida de las personas” puede ser loable, pero todos se preguntarán ¿qué significa eso y cómo se reflejará?

Por último, el Propósito y los valores deben redactarse con esmero y cuidando el detalle. Son enunciados de alta importancia pues envían una señal a los colaboradores sobre lo que tiene valor para la empresa y en particular para la Universidad Corporativa.

En IDESAA, por 30 años, hemos diseñado y entregado soluciones de capacitación y desarrollo, personalizadas y únicas para la empresa, que abordan sus retos y cumplen con sus objetivos particulares.

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Conoce al autor:
René Mena Seifert es creador, fundador y CEO de IDESAA, TRUE e-Learning y del Foro Pro-Talento Empresarial. Su especialidad es el diseño e implementación de soluciones de negocio basadas en proyectos de capacitación y desarrollo de talento hechos a la medida de las empresas.