Un estudio realizado por Microsoft revela que más de 40% de la fuerza laboral global está evaluando la posibilidad de cambiar de empleador este año debido al agotamiento laboral. Esto nos demuestra que hay algo que las organizaciones están dejando pasar, recordemos que el capital primordial de las empresas se encuentra en el capital humano y el talento que éste nos ofrece. De aquí la importancia de enfocarse en desarrollar los conocimientos, habilidades y aspiraciones de los colaboradores para retenerlos mediante el compromiso y la satisfacción laboral en ambas direcciones (compañía y colaborador).
Direccionar este desarrollo de conocimientos y habilidades, así como propiciar la retención y satisfacción de los colaboradores es posible mediante un Plan de Desarrollo Individual (PDI). Esta es una herramienta que permite identificar la mejor ruta a seguir para alcanzar objetivos de mejora en desempeño y de desarrollo, de acuerdo con las necesidades, aspiraciones o intereses ya sea a corto, mediano o largo plazo y seguir creciendo tanto profesional como personalmente.
Si en tu organización aún no se ha implementado o te gustaría saber cómo implementarlo, te compartimos las diferentes etapas que componen un PDI. ¡Aseguremos el proceso y repasemos!
- Identificar y analizar el estado actual del colaborador (grado de desarrollo de sus competencias, nivel de desempeño, potencial) y de la organización, buscando la alineación y suma de esfuerzos hacia una misma visión.
- Clasificar por medio del Mapeo de Talento e identificación de conocimientos, habilidades, aspiraciones y aspectos personales. No olvides incluir los resultados de las diferentes herramientas de evaluación de talento (Ej. 9 Box, 360°, Factores Críticos, u otros).
- Crear el PDI en función del rol actual, plan de carrera y resultados de evaluación estableciendo las acciones de crecimiento a realizar, a quién se rendirá cuentas y el tiempo para cada acción.
- Ejecutar el PDI de forma continua.
- Evaluar el programa y brindar seguimiento periódico al PDI. Para asegurar el funcionamiento eficiente según las expectativas organizacionales podemos observar métricas funcionales y avances en planes individuales (ej. porcentaje de puestos cubiertos ocupados con personas con planes individuales de desarrollo, porcentaje de permanencia en un mismo puesto y otros).
Contar con PDI contribuye de diferentes formas a tu organización, entre ellas:
- Perfecciona el capital humano de la organización, haciendo colaboradores más preparados y con mejores herramientas que logren superar los desafíos diarios.
- Identifica el talento clave con base en sus conocimientos, habilidades, aspiraciones y potencial de carrera.
- Ofrece al colaborador actuar en función a su rol y producir con más eficiencia y calidad alineando sus deseos personales con su plan de carrera.
- Eleva el compromiso y la satisfacción profesional del colaborador propiciando su permanencia en la empresa.
Cuéntanos, ¿Cómo han implementado el PDI en tu organización?
En IDESAA contamos con un staff de consultores especializados en todas las áreas de negocio, con amplia experiencia en brindar orientación y herramientas, para facilitar y acompañar a las empresas en procesos de solución de problemas e implementación del cambio, así como de planeación, análisis, establecimiento de metas, KPI´s y más.
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Diplomado en Desarrollo de Competencias Gerenciales
Conoce a las autoras:
Hilary Cruz es Licenciada en Administración por la Universidad Autónoma de Nuevo León, con experiencia laboral en Recursos Humanos y en el Desarrollo de Nuevos Negocios. Colabora en IDESAA en Desarrollo de Talento.
Patricia Bacco es Licenciada en Educación por la Universidad Autónoma de Nuevo León, con experiencia laboral cómo Psicopedagoga y en Diseño Instruccional. Colabora en IDESAA en Desarrollo de Talento.